Entre el ardiente gris oscuro de los fusiles, el crudo blanco de las teces pálidas muertas de miedo y el negro de las cabelleras yaciendo contra el suelo, destaca un abrigo rojo y minúsculo. La figura de una diminuta mujer que con aires menudos atraviesa las calles de un gueto en Cracovia, el día que decidieron masacrar a cientos de judíos que vivían en él, buscando refugio para no ser un cadáver más en la montaña de cuerpos sin vida que amontonarían, sin remordimiento alguno, al terminar la faena. Y es que entre toda la oscuridad en la que está inmersa la mente humana, de vez en cuando, si miras detenidamente, encontrarás un punto de color.

Esa diminuta pincelada de color fue Oskar Schindler para la existencia de 1.200 judíos que pudieron salvar sus vidas gracias a la astucia y a la consciencia de una de las pocas personas que durante el genocidio nazi abrió los ojos y miró a su alrededor por sí mismo. Él contrató a centenares de judíos para que trabajaran en su fábrica con la idea de hacer de ellos ciudadanos imprescindibles para la sociedad y que no fueran condenados a una muerte segura. Una historia épica de las que merecen una película, como ésta, y grandes actores como Liam Neeson y Ben Kingsley que se salen de la pantalla.

Tras tres horas de muertes, gritos y llantos desconsolados uno se pone a pensar en el por qué de todo esto. No es una película de ciencia ficción, hace menos de 70 años un ejército de seres humanos sin alma metía niños en cámaras de gas para que muriesen asfixiados, destrozaba familias prósperas condenándolas a la esclavitud y a la muerte, disparaba a hombres por el mero hecho de ser diferentes físicamente, de otra cultura y otras raíces; motivados por unos valores que les movían a ello.

Unos valores que son arena cayendo de nuestras manos, los mismos valores que nos nutren hoy en día y que no tienen memoria. 70 años después, los judíos no se acuerdan de que sus abuelos murieron porque no eran considerados personas, eran ratas y piojos, como reconoce el Comandante Amon Goeth a su sirvienta; y ahora se matan entre ellos por defender unos valores similares a los que acabaron con la vida de 6 millones de ellos mismos. Continúan la faena. Los alemanes tampoco se acuerdan de que no hace tanto estaban movilizados y perfectamente concienciados para establecer en el mundo la raza aria y acabar con el resto de etnias, el super hombre; y ahora las armas son otras, proporcionales a las consecuencias claro, pero ahogan con su poderío al resto de países que suplican soluciones a sus devastadas economías. Continúan la faena.

El ser humano es capaz de todo lo peor y al ver esta defunción en masa contada en verso se me caen los lagrimones de uno en uno y me avergüenzo de pertenecer a esta raza, que solamente es una y es la del ser humano. Y tiemblo al pensar que podía haber sido yo uno de esos hombres que aniquilaron sin motivo alguno y lloro al imaginarme que perfectamente me podría haber tocado a mí ser el verdugo. Ojalá que todos abriéramos los ojos y viéramos, como veía Oskar Schindler, “que el que salva una vida salva el mundo”. Él pagó por cada una de las vidas a las que salvó a base de chantajes, sobornos y funcionarios corruptos del Reich. Y es que, si con un alfiler de oro se podía comprar una vida…¿hemos avanzado tanto como creemos? Recomiendo que todo el mundo lea esta poesía porque al acabarla todos seremos más personas y menos humanos. Salvemos a la niña del abrigo rojo.

 Pablo Melgar

 

La lista de Schindler – John Williams

Título original: Schindler’s List

 

Año: 1993

 

Duración: 195 min.

 

Director: Steven Spielberg

 

Guión: Steven Zaillian (Novela: Thomas Keneally)

 

Música: John Williams

 

Fotografía: Janusz Kaminski (B&W)

 

Reparto: Liam Neeson, Ben Kingsley, Ralph Fiennes, Caroline Goodall, Jonathan Sagall, Embeth Davidtz, Norbert Weisser, Martin S. Bergmann, Mark Ivanir, Malgorzata Gebel, Shmuel Levy, Michael Schneider, Joachim Paul Assböck, Branko Lustig, Götz Otto

 

Productora: Universal Pictures / Amblin Entertainment

 

Género: Drama |  Nazismo.  Holocausto.  Basado en hechos reales.  II Guerra Mundial

 

Nota: 10 Excelente

 

Nota filmaffinity: 8,7

 

Nota IMDb: 8,9